La cadena de hoteles de titularidad pública Paradores (que antes se llamaban Paradores Nacionales) es un caso bastante curioso ya que, aunque a estas alturas es muy dudoso que pueda justificarse que el estado mantenga una empresa en un sector de la potencia y la profesionalidad del mercado hotelero español, sí que hay que reconocer que los Paradores han logrado crear un estilo propio y una marca más que reconocible ofreciendo un servicio de alta calidad.
Así, hospedarse en un Parador es para muchos de nosotros una experiencia viajera especial marcada por lo excepcional de los propios establecimientos (como el de Lerma que visité hace dos fines de semana y cuya foto acompaña este artículo), habitualmente edificios históricos deliciosamente recuperados, y por la calidad de su cocina, que suele ser poco menos que sobresaliente.
Pues bien, el año que viene será más barato disfrutar de esta experiencia, al menos para los menores de 35 años que no podían beneficiarse de Escapada Joven, hasta ahora sólo para menores de 30; y para los mayores de 55 que podrán aprovecharte de los Días Dorados cuya edad de inicio son actualmente los 60.
Además, la empresa ha anunciado que se invertirán ocho millones de euros en modernizar el Parador de Villafranca del Bierzo y que es probable que se inicien las obras del que será nuevo Parador de Béjar.
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